Colón perdió 1-0 ante Temperley por un polémico penal y quedó a cinco puntos del lider Chicago
A los 35 minutos del segundo tiempo, un polémico penal sancionado por el árbitro permitió a Ayunta anotar el único gol del partido. Oscar Garrido fue expulsado por doble amonestación.
Colón enfrentó a Temperley en el marco de la fecha 31 del torneo de la segunda división del fútbol con arbitraje de Franco Acita. A los 35 minutos del segundo tiempo, un polémico penal sancionado por el árbitro permitió a Ayunta anotar el único gol del partido. Oscar Garrido fue expulsado por doble amonestación.
Mala fortuna para el Sabalero en los primeros minutos del encuentro: el capitán Sebastián Prediger, que fue duda debido a una lesión en el hombro, se vio obligado a abandonar el campo de juego debido a una lesión en su pierna. En su lugar, ingresó Jourdan para cubrir la posición y tratar de mantener el equilibrio en el mediocampo.
Un centro peligrosísimo superó al arquero Vicentini, quien no pudo interceptar la pelota en el aire. El balón se estrelló contra el palo y comenzó a recorrer toda la línea de gol. Finalmente, en una reacción rápida, Vicentini logró capturar la pelota justo a tiempo, evitando lo que parecía ser un gol inminente.
A los 15 minutos de juego, Temperley intensificó sus esfuerzos ofensivos tratando de aprovechar las espaldas de los defensores de Colón, Castet y Garrido, para crear situaciones de peligro. Por otro lado, el Sabalero no lograba generar acciones de amenaza contra el arco defendido por Rago, quien hasta el momento se mantenía sin mayores inconvenientes.
Aproximándose a los veinticinco minutos de juego, el partido se estaba desarrollando de manera muy pareja, con ambos equipos sin lograr imponer un dominio claro sobre su oponente. A pesar de esta igualdad en el juego, Temperley mostró habilidad para avanzar con la pelota de manera precisa y organizada hasta llegar a los tres cuartos de cancha. En contraste, el equipo dirigido por Rodolfo De Paoli enfrentaba ciertas dificultades en las zonas defensivas de los laterales, lo que les impedía ofrecer una respuesta efectiva a las acometidas del adversario.
Un centro pasado llegó a la posición de Genaro Rossi, quien se encontraba en solitario dentro del área rival. Rossi tuvo la oportunidad de controlar la pelota sin oposición, preparándose para un posible remate. Sin embargo, el arquero Rago, en una acción rápida, achicó el espacio y cerró el ángulo de tiro.
Para el segundo tiempo, el director técnico del Sabalero decidió realizar cambios en la alineación, moviendo el banco de suplentes. En esta ocasión, hizo debutar al defensor Nicolás Fernández, quien ocupó el lugar de Rossi en el campo. Además, introdujo a Toledo para reemplazar a Neris. Con estos ajustes, el Sabalero adoptó un esquema de posicionamiento en la cancha que se asemejaba a una formación 5-4-1.
El delantero Luis López, de Temperley, tuvo una oportunidad inmejorable para abrir el marcador en el partido. Tras un centro preciso, López intentó colocar un cabezazo a tan solo unos metros del arco rival. Sin embargo, su remate rozó el palo derecho, que estaba defendido por Vicentini.
Las dificultades para Colón se intensificaron cuando, a los 14 minutos del segundo tiempo, Oscar Garrido recibió una segunda tarjeta amarilla. Esta sanción llegó como consecuencia de una falta cometida tras haber sido superado en su posición por el adversario.
Pocos minutos después un verdadero milagro ocurrió en el área sabalera. En una jugada, el arquero Vicentini realizó una impresionante intervención al detener un remate con el pie izquierdo, evitando así lo que parecía un gol inminente. Sin embargo, la acción no terminó ahí. En la continuación de la jugada, Ibañez tuvo la oportunidad de concretar el gol, pero a pesar de estar a escasos metros del arco, no logró ajustar su disparo correctamente.
A los 35 minutos del segundo tiempo, un pase en profundidad llegó con exigencia al jugador de Temperley, quien lanzó un centro. El árbitro, sin embargo, consideró que la pelota había tocado la mano de Castet. El lateral de Colón protestó indignado, argumentando que el balón le había golpeado en el pecho en lugar de en el brazo. Ayunta se hizo cargo del tiro desde los doce pasos y convirtió el primer gol del partido.
No hubo tiempo para más. Apenas terminó el partido, todo el plantel de Colón rodeó al árbitro para protestar la sanción del penal otorgado a Ayunta. Javier Toledo argumentó que el línea no había concedido el penal, pero que el árbitro, de todos modos, lo cobró. A pesar de las protestas, Colón no logra superar su mala racha como visitante y suma diez partidos sin conseguir tres puntos en esta condición.